Pero esta vez es el de mi hermano Luifer, "El Malo"... mmm... no, espera... si José Manuel es "El Bueno" y Luifer es "El Malo"... buff... Qué mal negocio hice, no?? Claro que tampoco es que tú, Luifer, seas un bellezón!! Bueno, a lo que iba...
Que sí!! Que un 13 de Septiembre (¡¡otro "hijo de Papá Noel"!!), hace ya un chorro de años, nacía mi hermano Goofy... No es que yo estuviera ahí, pero me lo contaron... Y hoy hubiera sido un gran día de haber estado en la isla... No, mentira... ahora que lo pienso, realmente hoy hubiera sido el típico día horrible, en el que prometía no salir más y no volver a ver a mi hermano...
Lo cierto es que extraño mucho a Lucifer...
Desde chico, que compartíamos cuarto, tuvimos mucha conexión... Ya por entonces, aprovechando la diferencia de edad, él me utilizaba cruelmente como “patrocinador” de sus viajes de fin de curso. Recuerdo que cuando se veía ajustado con la plata, me vendía hasta los recambios de los bolígrafos (gastados, por supuesto)... y yo, feliz, porque “tenía cosas de un mayor”...
Pero no crean que con los años, mejoró su “hijoputez” (no entiendo por qué el corrector ortográfico me señala esta palabra como incorrecta... me parece tan descriptiva!!... de hecho creo que el “grado de hijoputez” podría tener incluso la consideración de magnitud científica). De mayor siguió siendo igual... pero no creo que me permita contar lo de “aquella vez que fuiste a buscar algo para desayunar” (si lo convenzo, lo cuento en otro artículo!).
Durante esos años además creamos muchas tonterías... compusimos canciones fantásticas (todavía hay muchos que recuerdan el gran éxito de “Me voy a cagar”, aquella oda a la música heavy, que presentaremos una vez la registremos... que con esto de la piratería...)... fui testigo de sus primeros escarceos amorosos... de sus castigos veraniegos (de los que “El Bueno” tampoco salió ileso...), etc.
Lo dramático llegó cuando los dos crecimos lo suficiente como para que mi madre se empezara a preocupar... y mucho!! Y el dueño de aquel bar... y aquella chica que... mmm... cierto, cierto, todavía no tengo permiso!
El último tiempo en la isla, cuando me fui a vivir a la Playa de Las Canteras y mi hermano, que era incapaz de estar lejos de mí, vino JUSTAMENTE al piso de abajo, no hizo más que reforzar nuestra gran amistad... porque eso es lo que somos sobre todas las cosas... grandes amigos... Ni siquiera nos hemos peleado nunca por una chica... no por falta de ganas, sino porque a los dos nos gustan todas y, obviamente, al final eligen ellas!!
De verdad que lo extraño mucho... y sé que él a mí también... desde los paseos por la playa para comentar las “maravillas de nuestra tierra” hasta el uso de nuestro querido y patentado “interfono”, ese hueco del edificio a través del que nos comunicábamos:
Día D, 21 horas:
Que sí!! Que un 13 de Septiembre (¡¡otro "hijo de Papá Noel"!!), hace ya un chorro de años, nacía mi hermano Goofy... No es que yo estuviera ahí, pero me lo contaron... Y hoy hubiera sido un gran día de haber estado en la isla... No, mentira... ahora que lo pienso, realmente hoy hubiera sido el típico día horrible, en el que prometía no salir más y no volver a ver a mi hermano...
Lo cierto es que extraño mucho a Lucifer...
Desde chico, que compartíamos cuarto, tuvimos mucha conexión... Ya por entonces, aprovechando la diferencia de edad, él me utilizaba cruelmente como “patrocinador” de sus viajes de fin de curso. Recuerdo que cuando se veía ajustado con la plata, me vendía hasta los recambios de los bolígrafos (gastados, por supuesto)... y yo, feliz, porque “tenía cosas de un mayor”...
Pero no crean que con los años, mejoró su “hijoputez” (no entiendo por qué el corrector ortográfico me señala esta palabra como incorrecta... me parece tan descriptiva!!... de hecho creo que el “grado de hijoputez” podría tener incluso la consideración de magnitud científica). De mayor siguió siendo igual... pero no creo que me permita contar lo de “aquella vez que fuiste a buscar algo para desayunar” (si lo convenzo, lo cuento en otro artículo!).
Durante esos años además creamos muchas tonterías... compusimos canciones fantásticas (todavía hay muchos que recuerdan el gran éxito de “Me voy a cagar”, aquella oda a la música heavy, que presentaremos una vez la registremos... que con esto de la piratería...)... fui testigo de sus primeros escarceos amorosos... de sus castigos veraniegos (de los que “El Bueno” tampoco salió ileso...), etc.
Lo dramático llegó cuando los dos crecimos lo suficiente como para que mi madre se empezara a preocupar... y mucho!! Y el dueño de aquel bar... y aquella chica que... mmm... cierto, cierto, todavía no tengo permiso!
El último tiempo en la isla, cuando me fui a vivir a la Playa de Las Canteras y mi hermano, que era incapaz de estar lejos de mí, vino JUSTAMENTE al piso de abajo, no hizo más que reforzar nuestra gran amistad... porque eso es lo que somos sobre todas las cosas... grandes amigos... Ni siquiera nos hemos peleado nunca por una chica... no por falta de ganas, sino porque a los dos nos gustan todas y, obviamente, al final eligen ellas!!
De verdad que lo extraño mucho... y sé que él a mí también... desde los paseos por la playa para comentar las “maravillas de nuestra tierra” hasta el uso de nuestro querido y patentado “interfono”, ese hueco del edificio a través del que nos comunicábamos:
Día D, 21 horas:
- Ejem... ejem...
- Sí??
- Me acompañas a tirar esta tapa de Lambda al contenedor?
- Sí, por supuesto, nos vemos en el ascensor.
Día D, un montón de horas más tarde (sin encontrar el contenedor):
- Sí??
- Me acompañas a tirar esta tapa de Lambda al contenedor?
- Sí, por supuesto, nos vemos en el ascensor.
Día D, un montón de horas más tarde (sin encontrar el contenedor):
Por todo eso y por los almuerzos con Papá en el Japo... por las llegadas y, sobre todo, las salidas del Hoocke... por los comentarios viendo “Aída”... por el Mundial de Fútbol con Bailey´s... por la Guarida, el Blackpool y el Latino´s... por los secretos inconfesables... por el apoyo cuando hizo falta... por los desastres nocturnos y las amanecidas por la avenida... por “nuestra” Fiesta de La Rama... por estar ahora acá cumpliendo este sueño... y por un montón de cosas más...
¡Te quiero mucho, “Brodel”!
Y vente a verme, que ya celebramos el cumple por acá... ¿¿¡¡¡te imaginas la que podríamos armar!!!??
FELIZ CUMPLEAÑOS
Javi, El Gaucho Canario
Comentarios a: elgauchocanario@gmail.com
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