Estampas norteñas (III): Se veía venir...

Nuestro amigo Diego Armando se hallaba muy preocupado, ya que tenía enfermo a su pobre perrito Lionel. Lionel era realmente como un hijo para él... más que un hijo, seguramente... Por eso no lo dudó ni un instante. Merecía los cuidados de un buen especialista, así que lo llevó al veterinario que está a la vuelta de su casa:

- Por supuesto, Don Diego, no se preocupe. Vamos a dejar a Lionel como nuevo. Casi ni lo va a reconocer.

Hoy Diego Armando va a una fiesta con su nueva novia, Daniela, y va vestido con una camisa y unos pantalones vaqueros que se ajustan perfectamente a su cadera, gracias a un hermoso cinturón en el que se puede leer:

'No te pongas así, Lionel, que tú tampoco tenías idea de lo que significaba talabartería'

Javi, El Gaucho Canario
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